El Cuerpo humano, la materia y sus frecuencias

Feb 13, 2016 | Salud

Jay Emanuel MoralesEl cuerpo humano, sus sistemas, las células y los cuatro elementos pro­ducen sonidos y tienen frecuencias de resonancia específicas.

El Cuerpo Humano, Órganos, Sistemas y las Células

Cada átomo, molécula, macromolécula, organelo, célula, tejido, órgano, glándula y sis­temas de nuestro cuerpo absorbe frecuencias de sonidos, emite sonidos y también tiene una frecuencia de resonancia.

La célula es la unidad de vida más pequeña del cuerpo humano. Alrededor de 50 mi­llones de células mueren en un segundo en el cuerpo humano y al mismo tiempo se reproducen y son sustituidas por el mismo número de células nuevas. Durante ese ciclo de vida, los billones de células que componen nuestro cuerpo funcionan en estrecha colaboración, se comunican entre ellas, absorben sonidos, producen sonidos y tienen una frecuencia de resonancia específica.

El cuerpo humano se compone de diferentes elementos químicos provenientes de la Tierra. Hay más de 90 elementos que ocurren de forma natural en la Tierra y alrededor de 25 de ellos se pueden encontrar en el cuerpo humano. Los cuatro elementos más importantes que constituyen el 9.2% del peso corporal del cuerpo humano son: El oxí­geno (65%), carbono (18.5%), hidrógeno (9.5%), y nitrógeno (3.2%). Los elementos que constituyen el 3.7% del peso corporal del cuerpo humano son: El calcio 1.5%, fosfato 1.0%, potasio 0.4%, azufre 0.3%, sodio 0.2%, cloro 0.2% y magnesio 0.1%. La propor­ción química del cuerpo humano va cambiando a medida que vamos avanzando en edad y durante ese proceso, al igual que la Tierra, todos esos elementos vibran, generan frecuencias y tienen un ritmo específico.

Cada persona, cada animal, cada microorganismo, cada planeta y cuerpo celeste, cada elemento, cada átomo, cada célula, tejido, órgano, hueso y glándula del cuerpo produce sonidos y está en constante estado de vibración. Todo lo que existe en el plano físico genera sonidos, tiene su propia frecuencia vibracio­nal y tiene una resonancia específica que lo diferencia de otros cuerpos.

El cuerpo humano consiste de 10 sistemas básicos que son esenciales para la vida: los huesos, músculos, sistema circulatorio, sistema digestivo, sistema urinario, sistema ner­vioso, sistema reproductivo, sistema linfático, sistema endocrino y el sistema respirato­rio, todos estos sistemas producen sonidos, absorben frecuencias de sonidos y tienen una frecuencia de resonancia específica.

Todo lo que vemos, oímos, olemos, saboreamos, tocamos y percibimos, vibra. Cada sub-átomo, átomo, molécula, célula, tejido, órgano, hueso y sistema de nuestro cuerpo produce sonidos y vibra. Las vibraciones producen sonidos y los sonidos en alta fre­cuencia producen luz.

No sólo el universo macrocósmico y el universo microcósmico están en constante estado de vibración, nosotros también estamos produciendo sonidos y vibraciones constantemente y vivimos en un planeta donde todos los elementos están produciendo sonidos y vibraciones constantemente.

Los seres que sentimos y pensamos hemos sido creados por medio del poder del sonido y producimos el sonido por medio de la respiración. La respiración y el aire es lo que activa la fuerza de vida y del espíritu, el prana, chi o qi.

Por medio de la poderosa energía producida por la mente, el corazón y por medio del movimiento del aire que viaja desde los pulmones a la garganta, el movimiento de las cuerdas vocales y el movimiento de la lengua, se manifiesta el poder del verbo, la pala­bra y el sonido que tienen el poder de alterar la estructura atómica de la materia. Somos lo que pensamos y lo que decimos con nuestras palabras. Las palabras crean los sonidos y las frecuencias vibracionales que manifiestan lo que atraemos a nuestras vidas. Es imperativo que nos aseguremos de que nuestras palabras crean frecuencias de sonidos vibracionales armónicas  positivas que beneficien nuestra infinita trayectoria evolutiva.

 

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